Las Buenas Prácticas de Distribución y Transporte son parte de un sistema de aseguramiento de calidad y se enfoca en la distribución, el transporte y el almacenamiento de los productos farmacéuticos, dispositivos médicos y productos sanitarios, cumpliendo un conjunto de normas mínimas obligatorias respecto al sistema de calidad, instalaciones, equipos, embalaje, despachos, procedimientos operativos, quejas, contratos destinados a garantizar la calidad requerida para el uso al que están destinados.